CUEVA DE ESCOURAL

La cueva de Escoural se encuentra en el municipio de Montemor-o-Novo y es la única cavidad conocida en el actual territorio portugués con pinturas rupestres y grabados realizados en el Paleolítico Superior.

Su descubrimiento, en 1963, se debió a la exploración de una cantera, habiéndose encontrado, en su interior, una necrópolis neolítica. Posteriormente se detectarían las primeras pinturas. Fue clasificada como Monumento Nacional en 1963.

Los trabajos arqueológicos revelaron ocupaciones desde el Paleolítico medio y superior hasta el Neolítico tardío. El arte rupestre es rico y variado con una amplia presencia de motivos simbólicos pintados y grabados además de representaciones de fauna, especialmente caballos y bóvidos. 

Escoural destaca igualmente por ser un yacimiento clave para conocer el arte rupestre de los grupos cazadores recolectores del Holoceno Inicial.

En el exterior, en la elevación sobre la cueva, hay un conjunto de grabados rupestres y un pequeño asentamiento calcolítico amurallado. Cerca hay un Tholos (tumba megalítica de falsa cúpula).

Cabe señalar que en esta zona hay importantes monumentos megalíticos, como el Dolmen Grande da Comenda da Igreja y, en el municipio de Évora, el Cromlech dos Almendres y el Anta Grande do Zambujeiro.